Bienvenidos a Tierra de Nadie

domingo, 17 de enero de 2010

EL AMOR, TU Y LAS PALABRAS


Acabásteis siendo lo mismo:


basura

humo

casi nada.


martes, 5 de enero de 2010

DIÁLOGOS EN BLANCO Y NEGRO

- Si le hubieras mentido todo habría ido mejor.
- cállate…no quiero que digas eso
- ¿por qué? ¿te molesta la verdad? pues es tarde, niña.
- no creo que sea tarde; para la verdad no lo es.
- ¿ah no? ¿y qué vas a hacer?
- lo voy a contar todo.
- te has vuelto loca, no puedes hacer eso
- claro que puedo, yo soy la que hablo, tú no tienes voz.
- eres una zorra
- sí, lo aprendí de ti. Es más, no…no lo aprendí, tú me obligaste a ser así, pero ahora las cosas han cambiado. Ya no eres la más fuerte.
- muy bien, entonces hazlo. Sé valiente y cuéntalo todo. Te vas a quedar sola, nadie va a quererte y yo desapareceré, ¿has pensado qué vas a hacer sin mí? Bah…da igual, no vas a durar dos días, eres una inútil, una floja…
- ¡No lo soy!
- claro que lo eres, pero no es culpa tuya querida, hay personas fuertes y personas débiles, y a ti te tocó la parte mala, por eso me necesitas. Además, si lo cuentas te van a tomar por loca.
- estoy harta de que me manipules
- jajaja, yo no puedo manipularte. Tu eres Yo, ¿aún no te has dado cuenta, idiota?
- Yo no soy Tu
- claro que sí, somos una, y sabes que estamos bien juntas, nos complementamos. Si no la hubieses cagado con Él ahora no tendríamos este problema… hubiéramos seguido felices, como hasta ahora… ¿Por qué se te ocurrió hacer eso? ¿Por qué no le mentiste como a todos los demás?
- pues, porque… ¡no quería hacerle daño!
- ya, ¿y de qué te ha servido? Al final fue Él el que te utilizó a ti.
- Ya, pero bueno, prefiero eso a volver a la vida de antes
- ¿también prefieres llorar?
- sí…
- yo no quiero llorar
- bah, cállate, no seas hipócrita, tú nunca lloras por nada.
- claro que lo hago: muda en el estómago, retorciéndome en silencio, ahogada ¿crees que a mí no me duele? que no tenga voz no significa que no tenga sentimientos, no eres mejor que yo sólo porque se te moje la cara. Todas las palabras las creamos a medias; las mentiras antes de decirlas pasaron por tu boca, pudiste callarlas…lo que pasa es que te resulta más cómodo echarme la culpa a asumir la verdad, y la verdad, niña, no es eso que tu has imaginado, la verdad, la pura verdad es que Yo soy Tu, ¡Tu eres Yo!… Cariño…somos la misma persona…y ninguna de las dos podemos sobrevivir sin la otra.