
pero no es cierto.
Lo que pasa es que no tengo nada que perder
que ya he malgastado mucho tiempo en el silencio
y que las palabras al fin y al cabo
son sólo palabras
y no tengo por qué tenerlas miedo.
Ella me quiere.
Yo la quiero a ella.
La soplo en los ojos para que me bailen sus pestañas
y siento que no he visto nunca nada tan hermoso.
-cuadrados, Isa, cuadrados-me dice
y se funden nuestros labios en un beso.
3 comentarios:
muy bueno
me gusta como se alcanza a entrever cierta cosa indefinible donde dices que le soplas las pestañas, y luego ya no se ve nada pero uno sigue leyendo hasta el final acompañado del eco de esa cosa indefinible que apenas pudo llegar a entreverse
ñió....oiiio, jol
sagitario...entrever, entrever, vamos, creo que si entre-ves un poco más te empapamos en saliva. Gracias ;)
K!joooool!jajajaja
Publicar un comentario