Bienvenidos a Tierra de Nadie

viernes, 13 de junio de 2008

SALMOS POR LO QUE MIENTE

Tu ribete se disfraza
de un circo de enanos
que escuchan atentos
las palabras
de un señor.

Fingimos.
Todos fingimos,
fingimos querer
ser quien somos
y encendemos velas de color azul
porque tu dices
que en su fuego habita él
y nada es cierto,
y nada es falso
y elevamos un salmo
por su presencia inesperada.

Y a mi
se me olvido leer
y no supe rezar
ni elevar una cruz sobre el pecho
pero leo un salmo
que habla sobre hombres muertos
y tu no estas en él.

Solo sé mirar al suelo
avergonzada
y sé que el cura ha notado
que no creo en dios.

Y me toca leerte un salmo,
a ti,
que nunca pisaste una iglesia,
a ti,
que solo rozabas el fuego
en el humo del tabaco,
a ti,
que supiste engendrar una fe
que no habitaba en un templo.
a ti...
¡Válgame dios!

y no dije la ultima frase
esa de...ya sabes...

"en el nombre del señor"

y se apagó la vela

y todo lloró.